Nuestra historia
“¡Hacer el mundo mejor y más colorido!”, esta es precisamente la misión de Flower Burger, la primera vegamburguesería nacida en 2015 en el corazón de Milán, en constante expansión tanto en Italia como en el extranjero.
La flor como expresión de positividad, alegría y amor. Un vínculo con la naturaleza que se manifiesta en los tonos del arco iris con una propuesta culinaria 100% vegana: hamburguesas cuya característica fundamental es el color.
Se pasa del pan amarillo hecho con cúrcuma, al violeta gracias a la zanahoria negra, hasta el amado rosa, obtenido gracias al extracto de cereza. El equipo de Flower Burger está siempre en busca de nuevas coloraciones naturales y de nuevos ingredientes para sorprender y cautivar a nuestros clientes. Jungle Burger, Flower Burger y Cherry Bomb son solo algunas de las propuestas ofrecidas acompañadas de patatas aromatizadas con pimentón, edamame o patatas “buenas”. Brotes de soja, tofu, garbanzos y quinoa se han convertido en alimentos de nuestro día a día y Flower Burger sabe cómo combinarlos para crear una hamburguesa de sabor explosivo que enamore a todos.
Un concepto nacido de la idea de Matteo Toto, joven empresario, que emprendió un viaje en busca de sabores y gustos y con el objetivo de descubrir el punto de encuentro perfecto entre la hamburguesa y la cocina vegana.
Una vez cruzado el umbral del local, te recibirá una atmósfera amigable que hace guiños a la cultura de los “hippies”. El local alberga paredes gráficas coloridas y psicodélicas mezcladas con atmósferas del mundo del clubbing, dando vida a un divertido juego de luces. Un submarino adorna las paredes recordándonos el Yellow Submarine de los Beatles y detrás de una cortina de colores de los años 70 se encuentra la cocina, el lugar donde nacen nuestras creaciones.
Una mezcla de épocas cuyo hilo conductor es la armonía con el planeta y la unión entre las personas. Un viaje hacia la isla que no existe…